Cómo Crear un Sistema de Conocimiento Personal que Impulse tu Creatividad
Tu Sistema de Conocimiento Personal debería reflejar tu mente curiosa y apasionada por muchas cosas.
En este artículo:
1. El método C.O.D.E. de Tiago Forte: el poder de las notas útiles.
2. El método «Buscar-Entender-Compartir» de Harold Jarche: conectar los puntos
3. El enfoque «La curiosidad primero» de Ness Labs: dejarse llevar por los intereses
4. «Roba como un artista» de Austin Kleon: remezclar, no reinventar
5. El trabajo de Jay Acunzo: crear para resonar, no solo para producir
Poniendo todo en contexto
Cómo Crear un Sistema de Conocimiento Personal que Impulse tu Creatividad
Tu Sistema de Conocimiento Personal debería reflejar tu mente curiosa y apasionada por muchas cosas.
Por: Jenn- jscreative
¿Alguna vez has sentido que tu mente es un hervidero de ideas, intuiciones y momentos de inspiración, pero que cuando más los necesitas, no los encuentras por ninguna parte? No eres el único. Para las personas con múltiples pasiones, este caos mental puede ser tanto una bendición como una maldición. Las ideas surgen con facilidad, pero ¿gestionarlas? Eso es otra historia.
Te presentamos la gestión del conocimiento personal (PKM, por sus siglas en inglés de “personal knowledge management”): una forma de organizar tus pensamientos, tu creatividad y tus ideas para poder utilizarlos cuando más lo necesitas.
Pero aquí está la clave: no existe un sistema único que sirva para todos. Tu PKM debe reflejar tu mente curiosa y polifacética. Exploremos cinco ideas poderosas que puedes combinar para crear un sistema de conocimiento que respalde no solo lo que sabes, sino también lo que creas.
1. El método C.O.D.E. de Tiago Forte: el poder de las notas prácticas
Tiago Forte, creador de Building a Second Brain, dice que un sistema de conocimiento no se trata de acumular información, sino de hacerla útil. Su marco C.O.D.E. (Capturar, Organizar, Destilar, Expresar) lo explica así:
Captura las ideas y los conocimientos que despierten tu interés. Una nota adhesiva, una nota de voz o una app como Notion, lo que te funcione.
Organízalas para poder encontrarlas más adelante. Puedes usar categorías, etiquetas o incluso una simple lista de «Proyectos».
Destila tus notas hasta llegar a su significado esencial. Pregúntate: ¿qué es lo más importante que puedo sacar de esto?
Expresa tus ideas utilizándolas en tu trabajo. Compártelas en un blog, diseña un producto o pruébalas en una conversación.
La magia está en la simplicidad. No estás guardando todo, solo lo que despierta tu curiosidad o resuelve un problema. ¿El objetivo? Crear un sistema que te sirva en tu vida, no uno que estés constantemente «arreglando».
Pregunta para reflexionar: ¿De qué manera podrías hacer que tus notas fueran más fáciles de encontrar o utilizar?
2. El método «Buscar-Sentir-Compartir» de Harold Jarche: conectando los puntos
Harold Jarche añade otra capa con su modelo «Buscar-Sentir-Compartir», diseñado para convertir la información en sabiduría:
Buscar: Sigue tu curiosidad. Explora libros, podcasts, conversaciones o temas que te fascinen.
Sentir: Dale sentido a lo que has encontrado. Reflexiona, escribe un diario o conecta ideas de nuevas maneras.
Compartir: Comparte lo que has aprendido con los demás: entradas de blog, debates o incluso charlas informales.
¿Cuál es la belleza de este enfoque? Es cíclico. Compartir da lugar a comentarios, lo que a su vez despierta nuevas búsquedas, y el proceso se repite. Piensa en ello como una forma de perfeccionar tus ideas con el tiempo sin dejar de avanzar.
Pregunta para reflexionar: ¿Cuándo fue la última vez que compartiste una idea y aprendiste algo inesperado a cambio?
Foto de Lukas Blazek en Unsplash
3. El enfoque de Ness Labs basado en la curiosidad: dejá que tus intereses te guíen
Ness Labs lleva el PKM más allá al apostar por la curiosidad como motor del aprendizaje. En lugar de recopilar u organizar el conocimiento de forma rígida, sugieren adoptar un proceso iterativo y lúdico:
Seguí las preguntas que te entusiasman. ¿Qué realmente querés saber?
Date permiso para explorar sin juzgar. Cuanto más dejes que la curiosidad te guíe, más orgánico te parecerá tu sistema.
Construí «jardines de conocimiento», no silos rígidos. Esta mentalidad pasa de recopilar datos estáticos a cultivar conocimientos en constante evolución.
Cuando tratás tu sistema PKM como un experimento vivo, deja de ser una cuestión de perfección y se convierte en un crecimiento creativo.
Pregunta para reflexionar: ¿Qué pregunta te despierta la curiosidad en este momento? ¿Cómo podrías explorarla hoy?
4. «Roba como un artista», de Austin Kleon: remezclá, no reinventes
El consejo de Austin Kleon nos recuerda que la creatividad no consiste en empezar desde cero, sino en remezclar lo que ya existe. Como él dice: «Eres una mezcla de lo que dejas entrar en tu vida».
Toma prestadas ideas sin vergüenza. Una entrada de blog, un garabato, una conversación: trátalos como ingredientes creativos.
Añade tu perspectiva. ¿Cuál es tu punto de vista único? ¿Cómo puedes conectar esta idea con otra cosa?
Ten un archivo de referencia. Puede ser una carpeta digital, un cuaderno o incluso un tablero de Pinterest lleno de cosas que te inspiran.
La clave está en combinar estos elementos para crear algo único y propio. Tu sistema de conocimientos no es solo un repositorio, es un patio de recreo creativo.
Pregunta para reflexionar: ¿Qué idea te ha inspirado recientemente? ¿Cómo podrías darle tu propio toque?
5. La obra de Jay Acunzo: crear para resonar, no solo para producir
Jay Acunzo nos reta a ir más allá de «simplemente hacer cosas» y centrarnos en construir una obra, una colección de creaciones que cuente una historia más amplia.
La clave es la resonancia: tu trabajo debe ser importante tanto para ti como para tu público ideal. Eso empieza por la claridad:
Conoce a tu público: ¿Quiénes son? ¿Qué preguntas se hacen? ¿Qué despierta su curiosidad?
Cuando entendés realmente a tu público, tu trabajo se vuelve naturalmente más relevante e impactante.
Filtrá tus ideas: en lugar de intentar hacerlo todo, preguntate: ¿Esto se ajusta a mi perspectiva y valores únicos? ¿Mejorará la vida de alguien?
Jugá a largo plazo: cada entrada de blog, producto o idea compartida es un punto en un mapa más grande. Con el tiempo, esos puntos se conectan y forman un conjunto de trabajos que reflejan tu crecimiento y el valor que aportás a los demás.
El enfoque de Acunzo nos recuerda que crear no se trata solo de producir, sino de generar confianza, conexiones y un legado que se sienta auténtico.
Pregunta para reflexionar: ¿Qué podrías crear hoy que te parezca auténtico y significativo para tu público?
Foto de Jan Kahánek en Unsplash
Poniendo todo en contexto
Un sistema de conocimiento personal no es solo una herramienta para organizar ideas, es la base de algo más grande: el trabajo que dejarás atrás.
Cuando combinas estos enfoques (C.O.D.E., Buscar-Sentir-Compartir, curiosidad, re-mezclar y construir un conjunto de trabajos), no solo estás gestionando el conocimiento. Estás creando un sistema que alimenta tu creatividad, amplifica tu voz y te conecta con los demás de manera significativa.
Ya sea que estés escribiendo, diseñando o simplemente explorando, tu PKM no se trata solo de recopilar ideas. Se trata de usarlas para contar tu historia y conectar con tu público.
Reflexión final: ¿Qué historia quieres que cuente tu obra? ¿Cómo puede tu sistema de conocimiento apoyar esa visión?
Empieza poco a poco, mantén la curiosidad y deja que tu creatividad te guíe. Los puntos se irán conectando a medida que avances.
Sobre Renaissance Mind (Mente renacentista) por jscreative.ca
Esta newsletter de Jenn, como ella explica, tiene un público claro:
Las personas con una mente renacentista no se limitan a un solo campo, sino que siguen su curiosidad y se mantienen abiertas a cualquier cosa que les interese.
Nota: Agradecemos a Jenn- jscreative su colaboración en este artículo, adaptado del suyo en inglés:
Muy bueno 😃
Muy útil cómo lo plantea: no como sistema cerrado, como ecosistema vivo que se adapta a tu forma de pensar, crear y conectar. Me gustó la idea de que gestionar el conocimiento no es solo organizarlo, también es diseñar las condiciones para que florezca. Muy bueno.